Poco después de la conquista de Europa Occidental, Alemania ataca al Reino Unido. Esto debe suceder a través de la vía aérea, debido a que la marina británica es más fuerte que la alemana. Alemania inicia en julio de 1940 los ataques aéreos a los puertos y barcos, aeropuertos y otros lugares a lo largo de la costa de Inglaterra. Hitler planea invadir Inglaterra con un ejército, pero esto es imposible debido al hecho de que la fuerza aérea alemana no es tan poderosa como la de los británicos. El 25 de agosto de 1940 la fuerza aérea británica bombardea Berlín. El contraataque no hace mucho daño, pero sí cambia los planes alemanes.
A partir del 7 de septiembre, Londres será bombardeada durante 57 días seguidos y otras ciudades también serán duramente golpeadas. Los ataques aéreos alemanes continuarán hasta el otoño de 1941. Se los denomina 'The Blitz', pues esta es la palabra alemana para relámpagos.
La batalla de Gran Bretaña cuesta la vida a 27.450 civiles y mucha más gente resulta herida. Más de un millón de casas han sido destruidas, pero el Reino Unido no sucumbe y Alemania pierde la batalla de Inglaterra.